El último estreno potente en nuestra taquilla ha sido el de American Pie: El reencuentro, cuarta entrega (de las estrenadas en salas comerciales) del grupo de adolescentes liderado por Jim (Jason Biggs). Esta semana, en la película de la discordia recordamos como empezó todo, hace 13 años nada más y nada menos, en 1999 con American Pie de Paul Weitz (Un niño grande, Ahora los padres son ellos). Chris Klein, Thomas Ian Nichols, Eddie Kaye Thomas y Seann William Scott completan el quinteto protagonista.
Si hubiese un adjetivo que describiese la mayoría de películas americanas sobre adolescentes sería este: chorrada. Pero aunque podría parecer que American Pie no es más que una película para adolescentes salidos de tono, y aunque es posible que gran parte de su éxito sea el reflejo y la identificación que puedan sentir algunos con ciertas situaciones (esperemos que no todas, por favor ;P) esta y la saga entera son películas bastante notables dentro de lo que nos podríamos encontrar en este panorama.
Primero, porque los personajes (bien caracterizados), las situaciones vergonzosas y los diálogos son pese a quien le pese, memorables; las conversas entre Jim y su padre (un grandísimo Eugene Levy), lo que sabemos que pasa con la tarta de manzana, Stifler y su madre (o MQMF), Sherminator, todo, consigue hacerte reír un buen rato llegando a la carcajada y crear la empatía suficiente como para querer ver la segunda, la tercera y ahora la cuarta. Segundo, porque aunque no sea mi caso y no me identifique con ninguna de las situaciones ni personajes, no me crean rechazo ni llegan a hacerme sentir incómoda, básicamente por la representación del personaje femenino; no nos engañemos, a pesar de la exageración de la mayor parte de las situaciones y de la premisa general (la apuesta que hacen antes de llegar a final de curso) nada es inverosímil, y no hay duda de que buena parte de los adolescentes tienen una gran obsesión en lo que al sexo se refiere. Así que, por todo ello, y con una gran banda sonora en general para la saga, American Pie se convierte en una notable película que ha acompañado a muchos adolescentes durante años y que hace recordar grandes momentos.
Nota: 7
Alejandra Diez.
La comedia es el género más difícil de todos. Muchas personalidades del mundo del cine lo han dicho y es totalmente cierto. Hacer reír es mucho más difícil que hacer llorar -pregúntenselo si no a Greta Garbo, que no soltó una carcajada hasta que se puso en manos de Ernst Lubitsch, uno de las grandes cómicos de la historia del séptimo arte-. ¿Cómo conseguir que el público ría? ¿Cómo conseguir que la mayoría de los espectadores entren en un humor u otro? Con el fenómeno que generó la primera entrega de American Pie, parece que Paul Weitz consiguió la fórmula de la risa perfecta.
He tardado años en ver esta película, solo la primera, pero como suele pasar siempre que las expectativas son bajas, el resultado no es tan malo. Así pues, en lugar de encontrarme con una grollería llena de escenas soez, he descubierto un compenetrado elenco de actores, divertidos, inocentes y un poco patéticos (esa es la gracia) que saben mantener el ritmo a un guión no muy destacable, pero si con algunos puntos fuertes (el baile-webcam, el gran Eugene Levy y el momentazo Mrs. Robinson). Así pues, ¿fórmula de la risa? Quizás, habrá que ver las siguientes para poder valorar la saga entera. Sin embargo, no fórmula de la carcajada, algo que sí que ha conseguido Todd Phillips.
Nota: 6
Maria del Mar Gallardo.
No es fundacional, puesto que resucita el espíritu de otras comedias adolescentes como Porky’s o Desmadre a la americana. Lo que está claro es que American Pie es una cinta generacional, ha marcado la preadolescencia y adolescencia de muchos espectadores en todo el mundo. A menudo el público adulto no disfruta (ni valora) esta película (y semejantes) como se merece (n). Su frescura, su transgresión y su gamberrismo hacen de ella una de las comedias más refrescantes de los últimos años. Eso se logra en parte gracias a cinco personajes masculinos, regidos por clichés, pero llevados con mucha soltura y creando un icono del cine reciente: Steve Stifler. Otra gran creación de esta saga es el padre de Jim (fantástico Eugene Levy), el contrapunto adolescente (o no tanto).
American Pie es una divertidísima metáfora sobre el paso a la edad adulta, sobre madurar mediante un grupo de jóvenes adolescentes que se marcan un objetivo común: follar (así de claro) antes de terminar el instituto. Eso les llevará a tomar caminos distintos: seducir a la novia, ligar con la buenorra virgen del coro, satisfacer el deseo sexual con una mujer exótica (el personaje de Nadia y Jim ofrecen la escena más desternillante del film, la famosa sesión con la webcam) o esperar el momento idóneo (alias la madre del amigo capullo). El guión estructura muy bien los gags y deja espacio para desarrollar unos personajes nostálgicos o en los que se proyectan las aspiraciones del futuro. Se sustenta en los lugares comunes del género teen americano de películas (Clerks o las citadas anteriormente) y de series (Sensación de vivir o la reciente Glee) más el gamberrismo de los hermanos Farrelly. No hay escatología en exceso, se agradece (y mucho) el evitar caer en el terreno del machismo y las groserías están medidas en su justa porción. Posiblemente no falte nada, tampoco sobra nada. Ahora bien, no es ni mucho menos perfecta. Eso sí, es una estupenda comedia que merece un visionado más allá de los 20 años: es disfrutable por todos a partes iguales. Sus secueles ya son otro cantar (exceptuando la pasable y divertida segunda entrega, el resto funcionan como perfectos guilty pleasure). Esta primera entrega es más que un simple guilty pleasure.
Nota: 7
Alain Garrido.
PD: ¿Cuál es vuestro veredicto de esta saga? ¿Cuál es vuestra preferida?
Sólo he visto las dos primeras y no me dijeron nada. Este tipo de películas caca, culo, pedo, pis y continuas chanzas sexuales no me hacen la más mínima gracia.
ResponderEliminarSaludos.
Eso es lo que pensaba una de nuestras redactoras, pero al ver la primera tampoco le pareció que se excedieran tanto en este tipo de cosas (alguna escena hay, pero bueno...). Eso sí, el humor es lo que tiene: ¡a gustos, colores! :D
Eliminar¡Saludos!
La primera vez que supe de American Pie fue 3 meses antes de que se estrenara en España a raíz de la canción principal de la peli que era del grupo Tonic el tema You Wanted More que me llamo bastante la atención y fue viendo la MTV, para bien o para mal esta peli fue el comienzo de nuevo de resucitar las comedías para adolescentes, a mi me gustan bastante las dos primeras partes porque yo era adolescente cuando se estrenaron y tanto la música como el ambiente siempre que veo estas pelis me da nostalgia, una lastima que en la tercera y sobre todo en la última entrega esa ilusión se haya apagado porque ya al ver a los protagonistas tan adultos y uno al también serlo sus situaciones no me hagan tanta gracia como en las dos primeras entregas será que uno madura y todo con el tiempo se pasa.
ResponderEliminarSaludos :)
Parece mentira cómo nos marcan algunas películas -sean mejores o peores- durante una etapa de nuestra vida. :D
Eliminar¡Saludooos!