jueves, 3 de noviembre de 2011

'Nader y Simin, una separación', un soberbio melodrama universal


Tengo muchas películas pendientes para poner reseña. Poco a poco, las iré poniendo todas. Hoy es el turno de un melodrama iraniano que conquistó el último Festival De Berlín -al ganar el Oso de Oro a lamejor película y los Osos de Plata a las mejores interpretaciones masculinas y femeninas- . De hecho, el cine iraniano hace año que vive de una etapa de muy buena salud y el público occidental está encantado -con varios éxitos en los circuitos comerciales más pequeños- y aplausos en la mayoría de festivales internacionales.


La última cinta iraniana en llegar a nuestras salas es esta Nader y Simin, una separación del director Asghar Farhadi (A propósito de Elly). El cineasta borda su labor con un trabajo sólido, clásico y sobrio con un pulso narrativo de estilo propio. Farhadi no se conforma con explicar una historia, él quiere jugar y combina dos géneros, a priori imposible, como son el melodrama familiar y el thriller judicial; la jugada sale perfecta. La tensión por la trama legal se conjuga estupendamente con la emoción de las relaciones de los personajes.

Con esto, la película no pretende ser un retrato del Irán actual -sino más que eso- una inmensa historia universal sobre las relaciones en pareja, el desamor, el odio, la venganza, el miedo, la familia, la justicia (o injusticia) y la religión. Los temas algunos son desarrollados más ampliamente, otros tratados más a pinceladas, pero nunca superficialmente. Este amalgama se sustenta sobre la trama judicial (tanto el divorcio como la denuncia por aborto) y los personajes irán tomando ciertas decisiones que provocarán el melodrama más íntimo y profundo.

Sin duda, lo más loable del film es su guión del propio Farhadi. Un texto con cuatro personajes protagonistas magníficos, bien definidos y con un desarrollo totalmente humano, nada torpe ni vacío. Son las actitudes de ellos cuatro y la dualidad subsiguiente lo que harán que el espectador se acerque más a uno o a otro, no un guión escrito con una pretensión determinada -como si ocurría y ya indique ayer en la adoctrinadora Criadas y señoras- . El guión, repleto de matices, no marca los buenos y los malos, construye unos personajes interesantes y el espectador les pone el porcentaje de gris que él cree. Así es como se logran grandes historias y películas redondas, dejando al espectador su lugar para completar la obra de arte -porque, sí, ésta lo es- .

La separación del título acaba siendo secundario y la custodia de la niña más aún (con esos créditos en silencio) para dar lugar a una reflexión sobre las desigualdades sociales y el miedo a ser devorado. Además, otro gran punto a favor del guión es el punto de vista de los niños -la hija de cada matrimonio- ; unas niñas destinadas a madurar a golpes y a perder la inocencia ante la sucesión de los acontecimientos. Pero el guión no es solo esto, también tiene una estructura ejemplar de desarrollo del largometraje y una construcción de diálogos digna de mención.


La veracidad de la narración y la intensidad del relato se logran, en parte, gracias a un elenco excelente. Los cuatro (Peyman Moaadi, Shahab Hosseini, Sareh Bayat y Leila Hatami) recibieron sendos premios en Berlín para una labor perfecta que transmite naturalidad y sentimiento, nada forzado. Farhadi los deja fluir en el texto y ellos se comen la pantalla sin ningún miramiento y sus interpretaciones llegan hasta lo más hondo. Hay varios tour de force dignos de mención (la polémica escena de la escalera, la reunión final o cualquier silencio de Leila Hatami).

Definitivamente, nos encontramos con una historia muy humana, realista y universal. Una de esas películas que nos llegan gracias a sus premios prestigiosos y que sino desgraciadamente sería eclipsada una vez más por productos hollywoodianos prefabricados. Nader y Simin, una separación es una película imprescindible y, que a toda honra, ya es de lo mejor de este flojísimo -adjetivo que cada año toca más fondo- 2011.

Lo mejor: El guión y la naturalidad del reparto

Lo peor: ¿Se hubiera estrenado sin sus galardones berlineses?


Nota: 10


PD: Por cierto, muy probable competidora en la carrera de los Oscar para Pa negre. Difícil elección...

7 comentarios:

  1. No sabia on dir-ho, així que ho dic aquí! xD

    A l'enquesta he votat Pitufos perquè ho veia quan ho feien a TV3-K3, però en realitat d'aquests còmics que heu posat no m'agrada cap. Prefereixo el còmic japonès! :P

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  2. Primero de todo, decir que coincido totalmente con el análisis del film que ha hecho Alain. El iraní hace ya años que es un cine muy potente, artístico y creativo. Y por suerte en este caso la distribución ha sido generosa y hemos podido apreciar muchas películas iranís, incluso las que no tienen premios. Nader y Simin es un prodigio de guión y realización. ES increíble que un melodrama familiar pueda mantener un interés in crescendo más propio de un thriller. Los giros argumentales, los cambiantes puntos de vista de los personajes, las mentiras, todo contribuye a que, como dice Alain, el film no sea maniqueo sino lleno de matices. Sólo me gustaría añadir dos cosas más: estoy de acuerdo que el drama que viven puede ser universal, pero creo que en el caso de Irán la sociedad y la religión ejercen mucha (demasiada) influencia sobre los comportamientos, quizás como tan sólo hace 40 años o podían efectuar en la España nacional-católica. La contradicción entre la modernidad y la tradición en Irán es muy fuerte y la película nos hace un retrato soberbio también de este aspecto. Y la segunda cosa es que dentro del cuadro extraordinario de actores no podemos olvidar a Sarina Farhadi (la hija del director) que encarna impresionantemente el paper de Terneh, la hija de los protagonistas que se quieren separar. De acuerdo: de lo mejor de este (flojísimo) 2011.

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  3. Estoy contigo acerca de la opinión sobre la película; a mi también me encantó.

    Esta película nos plantea una serie de circunstancias límite a las que los protagonistas hacen frente como pueden. Es un efecto dominó imparable de situaciones, decisiones y consecuencias.

    Sin embargo no estoy de acuerdo con lo que he leído acerca del supuesto análisis que se hace de la sociedad iraní,de la religión o del sistema judicial. El propio director en entrevistas comentó que esa no era su intención, él ha hecho una película humana y social ambientada en el lugar y en la cultura donde ha nacido, donde se a criado. Inevitablemente muestra situaciones y criticas, realidades que como él dijo, nosotros podemos intuir pero no lo entenderemos jamás como él.

    Pero por encima de todo es, y que a pesar de estar muy bien e inevitablemente ambientada por la cultura y la sociedad de Irán, plantea problemáticas y preguntas globales, que podemos llegar entender, indistintamente de nuestra procedencia.

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  4. Cierto, alabando el punto de vista de las dos niñas, y después no alabando las interpretaciones de ellas dos. Como sus padres ficticios, brillan mucho!

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  5. Muy de acuerdo con todo lo que dices en la crítica, Alain! Es sin duda una de las mejores películas del año, sobre todo por estas interpretaciones tan naturales, tan reales, y una trama que sabe perfectamente juntar la linea de las relaciones humanas, de pareja, familia, laborales, con otra linea más cercana al thriller y al género judicial.

    En cuanto a lo que decís que es universal, es verdad, lo mejor de esta película es que se podría extrapolar esta situación en cualquier sociedad y punto del mundo. Ahora bien, la película está hecha en Irán, y como tal, el telón de fondo nos muestra a nosotros la sociedad iraniana actual. Así que, aunque no sea el objectivo principal del director, sí que indirectamente nos llegan a nosotros ciertas características propias de la sociedad en que vive Farahdi, siendo la religión uno de sus elementos clave (es la religión la que en ciertos puntos de la película hace avanzar la narración).

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  6. A mi también me ha encantado la película. Creo que es una película que nos hace vivir lo que los protagonistas están viviendo.

    De acuerdo con que retrata unos problemas que pueden ser universales pero también es cierto que mucho de lo que pasa en la película viene condicionado por el tipo de sociedad actual iraní muy influenciada por la religión.

    Por lo tanto sí creo que es un retrato de la sociedad actual iraní, bien es verdad que el director que pretende criticarla.

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  7. En la última frase hay un error de ortografía lo que quiero decir es: que el director no pretende criticarla.

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